INTRODUCCIÓN.

En este y otros medios en los que me ha tocado participar como contribuyente a la enseñanza de los padres de la cultura médica para sus hijos casi siempre he comentado sobre la fiebre y ahora que me he percatado de ello quiero hablar de lo contrario: la hipotermia, ya que aunque no es tan frecuente si es muy peligroso, incluso a veces más peligroso que la fiebre. Veamos:

LA HIPOTERMIA

En términos claros y sencillos hipotermia es lo contrario de fiebre, de hipertermia. Es cuando la temperatura corporal, por diversos medios desciende a temperaturas por debajo de lo normal. Por debajo de los 35 grados centígrados. Los baños en agua fría o la exposición a temperaturas bajas sin el adecuado abrigo pueden provocar hipotermia en nuestros pequeños. En estos casos debemos recurrir al termómetro para su diagnóstico y seguir unas sencillas pautas de actuación hasta la valoración del pediatra.

La hipotermia, repito, es el descenso de la temperatura corporal por debajo de los límites normales, es decir, por debajo de 35 grados. Suele ser consecuencia de la exposición a temperaturas frías durante un tiempo prolongado, bien en el agua, bien en un ambiente frío, por exceso de medicamentos, etcétera.

GENERALIDADES:

La liberación de hormonas para generar calor y los temblores corporales son mecanismos de nuestro cuerpo para impedir la pérdida exagerada de temperatura.

Los más propensos a padecer este serio problema son los bebés y los adultos mayores, pues la capacidad de su organismo para regular la temperatura aún no está desarrollada totalmente en los niños pequeños y en los ancianos ya por la propia edad estos mecanismos empiezan a fallar.

En el caso de niños, en ocasiones, son los propios padres o madres los que les provocan la hipotermia Muchos son los que, de forma errónea, cuando el pequeño tiene fiebre, tratan de bajarle la temperatura exponiéndolos al aire frío intenso o sumergiéndolos en agua fría, incluso agua helada. En estos casos, el niño puede llegar a sufrir un shock por termorregulación, lo cual significa un cambio muy brusco de temperatura.

Catarros en los bebés.

Los muy famosos y frecuentes catarros en bebés y niños son una de las causas más frecuente de consulta en pediatría durante la época invernal. Aunque el pediatra es el que debe indicarte el tratamiento adecuado, conviene que conozcas remedios caseros para aliviar las molestias propias de esta enfermedad.

¿CÓMO DETECTAR LA HIPOTERMIA?

Los síntomas de la hipotermia pueden ser muy variados según la intensidad de la misma. Los temblores corporales, las extremidades frías, la respiración y el pulso lentos, la dificultad de atención, la rigidez muscular, la confusión mental, la somnolencia, son algunos de los signos y síntomas más frecuentes.

En los bebés hay que estar muy al pendiente del calor que guarda su piel, si esta está muy fría o morada, o las manos temblorosas o acalambradas, con escaso movimiento, un tanto cuanto atolondrados, callados, llanto débil, quejumbrosos, un poco idos de la mente, como coloquialmente se dice.

OTRAS CAUSAS

Hace ya algunos años los mismos médicos recomendaban bajar la fiebre con baños de agua helada, incluso en los hospitales, en los servicios de urgencia pediátrica, se tenían tinas con agua y barras de hielo para meter a los niños hirviendo en fiebre, el resultado mucha mortalidad por estado de choque hipotérmico, motivo por el que se dejó de recomendar. Es una lástima que ahora se sigan observando esto ocasionalmente. No se debe hacer. Es más peligroso el remedio que la enfermedad.

Otra cosa que se hacía y que tampoco ya no se recomienda son los llamados baños de alcohol, ya sea empapar la ropa del niño en alcohol o directamente frotar su cuero con esta sustancia. También hubo algunos muertos por ello. El alcohol es muy tóxico y se adsorbe por la piel y se inhala por la nariz. Ya no se recomienda para nada.

Otra causa es abusar de medicamentos para bajar la temperatura. Atacar la fiebre como si fuera la peste bubónica con uno y otro medicamento no es tan buena idea y frecuentemente se sobre dosifican los medicamentos y se puede generar hipotermia.

Recuerde que el tipo de antitérmico, la dosis y la frecuencia se la proporcione su médico y no el vecino.

¿CÓMO PREVENIRLA?

Evitando estas causas que he mencionado se previene la hipotermia. También evitemos el habiente muy helado. Debemos abrigar bien al niño, con varias capas finas de ropa no demasiado ajustada, ya que podría impedir la circulación.

¿QUÉ DEBEMOS HACER SI SE PRESENTA?

Bueno es estar al pendiente de los signos y síntomas anotados arriba y tomar con frecuencia la temperatura. Esta medición ha de realizarse por el recto, no por la axila. La toma de temperatura axilar es poco fiable, ya que el valor registrado dependerá de la humedad de la piel, del tiempo de toma, etcétera. Lo que debemos de hacer es mientras lo ve el pediatra es:

- Aumentar la temperatura corporal del niño empezando por la parte central del cuerpo (pecho, cabeza, cuello y abdomen). Para ello utilizaremos mantas o ropas calientes. En su defecto, emplearemos nuestro propio cuerpo, poniéndolo en contacto con nuestra piel.

- Si la hipotermia es debida a la inmersión en agua fría, sacaremos inmediatamente al pequeño del agua y lo envolveremos en toallas o ropas calientes.

- Mantener caliente la temperatura de la habitación donde se halle el niño.

- Si está consciente, darle dulces y bebidas calientes.

- Acudir al médico con urgencia.

- Suspender los medicamentos anti fiebre que se le estén proporcionando al niño.

A TOMAR EN CUENTA:

Los contenidos de este tema médico sólo tienen carácter de información general. Esta información no debe ser utilizada con fines diagnósticos o de tratamiento. Sólo el profesional de la salud con licencia está facultado para tomar las decisiones adecuadas tras la evaluación de cada caso en concreto

Dr. Salvador Alvarado González

Pediatra- México