Los siniestros de tránsito constituyen una de las más importantes causas de muerte prematura en la sociedad actual

Conducir es una habilidad compleja

Recientemente, por causas y consecuencias relacionadas a hechos de tránsito, el Ministerio de Transporte de la Nación alertó que en 2016 murieron quince personas por día en todo el país y que cerca del 55% de las víctimas tenía menos de 35 años de edad. Según este nuevo relevamiento de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), durante el año pasado hubo 5.613 muertes en todo el territorio nacional. El 30% ocurrió en la provincia de Buenos Aires, donde unas 1.559 personas perdieron la vida en rutas y calles. En la Ciudad de Buenos Aires, en tanto, hubo 97 fallecidos durante ese mismo período, tal como revela una nota de Clarín.

En relación con países desarrollados y especializados debemos decir que, en la problemática vial, en la Argentina aún estamos muy atrasados. Por lo que se vive a diario pareciera que aquí recién estamos empezando a tomar conciencia y haciendo conocer a las personas que es importante pensar y comprender que nuestras conductas al volante pueden ser fatales. La gran mayoría de los siniestros de tránsito (llamados así porque pueden ser evitados por el ser humano) surgen por la creencia de omnipotencia que posee el hombre. Muchos de los siniestros se producen debido a que nuestro nivel de atención no está enfocado sólo en conducir (al usarse, por ejemplo, el uso del teléfono celular). Un 20 % de los siniestros viales se deben a los efectos del alcohol al conducir ya que nuestros sentidos al beber se ven seriamenteafectados. Por ello hay campañas que indican que hay que ser precavidos y evitar el pensamiento de “si me tomo sólo una copa, no pasará nada”. La velocidad es otra de las causas principales de siniestros de tránsito con el problema adicional de que cuando ocurre un hecho de esta naturaleza, generalmente tiene consecuencias graves. Pocos son los que saben que sobrepasar un vehículo por la derecha es indebido y se trata de una maniobra peligrosa, incluso más en carreteras de un solo carril. Por ello ocurren tantos y tan graves siniestros viales en las rutas nacionales, además de que muchas de ellas suelen presentar un piso deteriorado y poca iluminación. Aún se está en le etapa en la que hay que hacer entender a los conductores (y acompañantes) que es muy importante el uso del cinturón de seguridad en todos los asientos del vehículo. Así y todo es escasa su utilización.

La seguridad vial es un problema de salud pública. Los siniestros de tránsito constituyen una de las más importantes causas de muerte prematura en la sociedad actual. Conducir es una habilidad compleja que requiere un adecuado procesamiento de la información, vigilancia o mantenimiento de la atención, concentración y buena memoria. Debe haber control sobre los impulsos y la asunción de riesgos debe ser prudente y sensata, con capacidad para anticipar las acciones de otros usuarios de la carretera.

En definitiva, el objetivo de todos los actores relacionados con el problema de los siniestros viales es el de ayudar a modificar las actitudes, comportamientos y hábitos de los que componen el tránsito en las calles y rutas todos los días (conductores, peatones, ciclistas, etc.) para reducir el número de personas muertas y heridas en forma significativa.

Como dice la ONG Luchemos por la Vida, y que muchos aprobamos y coincidimos, hay tres cursos principales de acción a desarrollar en la búsqueda de soluciones: 1) crear conciencia en la población sobre el riesgo de los siniestros de tránsito, 2) educar a toda la población para que aprendan algunos comportamientos y hábitos que protejan sus vidas, reduciendo los riesgos de sufrir un siniestro y 3) promover la entrada en vigor de leyes apropiadas y su efectiva vigencia.

 Por Fernando Ulloa * Responsable de Conducta Vial (www.conductavial.com).