INTRODUCCIÒN 

Los pediatras debemos ocuparnos del bienestar de la infancia desde el nacimiento hasta la adolescencia, así, la función del pediatra no es solo dar algo para la tos o la fiebre, sino buscar que el niño esté BIEN. Bien en todos los sentidos y este artículo que leí, y que he modificado para adecuarlo a nuestro medio, de Baby Center trata de eso.

 Baby Center es una organización que procura el bienestar infantil sin fines de lucro y es bastante confiable en sus artículos escritos generalmente por especialistas como una información general sin pretender suplir la función del pediatra. Por tanto, provee información general con propósito educativo solamente y no de diagnóstico o tratamiento de problemas médicos. 

Los padres en la actualidad se ocupan mucho de la salud de sus bebés y he aquí unas cuantas recomendaciones para lograrlo. Son elementales y lógicas y se han usado siempre para ayudar a los niños a alcanzar todo su potencial. Veamos:   

DEMUÈSTRENLE SU AMOR 

Esto es elemental, los niños necesitan afecto real. El afecto demostrado con hechos desde etapas iniciales de la vida le proveerá autoestima sana con la cual podrán trazar su vida. Así, además de darle de comer, de cambiarle el pañal, debes darle caricias físicas, hablarle de manera cariñosa, así tenga unos cuantos días de vida, el contacto físico está bien demostrado que es de muchísima utilidad. Es muy beneficioso el contacto piel con piel, como le llamamos los que somos pediatras pro-lactancia (así nos dicen algunas mamás, y me agrada el término). Este apapacho es extraordinariamente útil para el desarrollo de una vida emocionalmente sana en su futuro. 

¿Y cómo puedes mostrarle su amor? Abrazándolo, acariciándolo, sonriéndole, alentándolo, escuchándole y jugando con tu hijo lo más posible. También es importante responder lo más rápido posible a su llanto, sobre todo durante los primeros seis meses de vida. El niño NO se malcría por esto. NO se echa a perder, ni nada de eso. Así que no tenga miedo de apapacharlo y apapáchelo mucho.  

Al contrario este apapacho es saludable. Este vocablo en lengua quiché quiere decir abrazo que cura el alma. Bello.  

ATIENDAN A SUS NECESIDADES BÀSICAS 

Por supuesto su bebé necesita un ambiente agradable, aliméntenlo, cámbienle el pañal de inmediato, báñenlo, vístanlo apropiadamente para cuidarlo del frío y del calor.  

Llévenlo al pediatra. Con todo respeto, el Médico General no debiera atender bebés tan pequeños, pues estos son un mundo muy diferente del niño mayor y no se diga del adulto. Llévenlo a su pediatra por lo menos una vez al mes a revisión, aunque esté sano. En estas revisiones el pediatra revisa el desarrollo psicomotriz y su crecimiento corporal, para detectar a tiempo algún problema y también está al cuidado del calendario de vacunación, esto es con la intención de recomendarles NO hacer caso del movimiento anti-vacunas, pues está súper comprobado que los beneficios de las vacunas superan enormemente, pero enormemente sus posibles riesgos.  

EL SUEÑO 

Favorezcan en casa un ambiente en el que el niño pueda dormir adecuadamente y por el tiempo que se requiera, el sueño es muy importante; durante el sueño las células cerebrales de su bebé trabajan en la formación de conexiones importantes que son los senderos a través de los cuales circula todo tipo de aprendizaje.  

HÀBLENLE                                                                                                                  Los estudios indican que los niños cuyos padres más les hablaron durante la infancia tienen coeficientes intelectuales significativamente más elevados y vocabulario más amplio que los niños que no recibieron mucha estimulación verbal. Puedes incluso empezar a hablarle a tu bebé mientras aún está en tu vientre, lo cual es una excelente manera de poner en marcha la formación de su vínculo emocional contigo. Así que háblenle. Háblenle cariñosamente y mucho. 

LÈANLE. 

Léanle.  Léanle a diario o lo más que puedan. A cualquier edad le pueden leer, no importa que aparentemente no entienda. Jim Trelease, un perito en lectura y autor del libro sobre cómo leerle en voz alta a tu niño The Read-Aloud Handbook, dice que hasta los recién nacidos les encanta escuchar cuentos. ¿Y cómo no, si la voz de mamá es música para sus oídos? O sea que acostúmbrense a leerle a su pequeño, desde el primer día.  

ESTIMULA TODOS  SUS SENTIDOS.  

Para que tu pequeño pueda aprender acerca de las personas, los lugares y las cosas a su alrededor, tienes que darle la oportunidad de experimentarlas. Los estudios demuestran que los niños criados en ambientes ricos en nuevas experiencias que estimulan sus sentidos, tienen cerebros más grandes y más activos que los que crecen faltos de estímulos sensoriales adecuados. El bebé recién nacido no es un monito de peluche. Interactúa con su medio ambiente desde el primer día de nacido. 

Es importante recordar que NO recomendamos que vean la televisión, ni cualquier tipo de pantalla electrónica, hasta después de los dos años. La Tele NO DEBE ser la niñera de los niños. Las sociedades pediátricas recomendamos, en el niño escolar sólo una hora, máximo dos, al día de ver pantallas electrónicas (tele, teléfono, tableta, etc.), y de la tele sólo programas constructivos, supervisados por un adulto, en un lugar visible, no en su cuarto y a solas. Diga NO a los juegos violentos, ni juguetes de uso militar. ¡Con las armas NO se juega!                               

  Juega con él. ¡Sí! ¡Claro!, pero juegos no violentos. Pónganle música alegre, clásica, romántica, cántenle, báilenle, háganle piruetas; permitan que lo abracen diferentes personas, para socializar.  

Por supuesto debo decirles que deben ser muy precavidos con los accidentes ya que están a la orden del día. Hagan de su casa u hogar seguro para su bebé.  

Aliéntenlos a vencer desafíos, a que construya con sus manos, que se vea obligado a intentar cosas nuevas y cada vez un poco más difíciles.  Resístanse a ayudarlos en todo. Dejen que se esfuercen un poco en hacerlas cosas que desean hacer, como mover una mesita, como subirse a una silla o que persiga una pelota. No hagan por ellos lo que ellos ya pueden hacer por si solos.  

CUÌDENSE USTEDES, PADRES. 

Hay más, muchas más cosas que pueden hacer para mejorar la vida de sus hijos, pero no hay espacio para ello, sólo les diré que ser mamá y ser papá es muy agotador. Así que búsquense un tiempo para ustedes. Las abuelas suelen ser personas maravillosas que les encantaría ayudarles a cuidar un rato a sus nietos. ¡Aprovéchenlas! 

*Dr. Salvador Alvarado González 

*Modificado de Baby Center