Dedicado a todos los abuelos del mundo

INTRODUCCIÒN:                                                                               

En otras ocasiones he escrito en este medio sobre los abuelos. ¿Será porque ya tengo casi 65 años? ¿Será porque ya tengo 40 años de egresado de la facultad como médico, general y 35 años como pediatra? ¿Será porque ya lo soy, porque ya he vivido la experiencia de ser abuelo? ¿O será porque a diario en mi consultorio trato con abuelos y sé de su importancia en el cuidado de los niños. Porque es que ellos son de una ayuda impresionante, casi indispensable?  Por el  motivo que sea, al leer este artículo de la Psicològa  Alejandra Rivas, me nació la necesidad de exponerlo a su consideración. Veamos, pues, lo que dice la Psicóloga Rivas:   

Ser abuelo es una de las experiencias vitales más gratificantes y motiva una nueva etapa en la vida. Es verdad que los abuelos son necesarios. Su ayuda puede ser especialmente valiosa para los matrimonios jóvenes y son eficaz complemento de la tarea educativa de los padres. Sin embargo, es una situación para la que no todos estamos preparados y no todos lo tomamos con la misma responsabilidad y filosofía, pues algunas personas creen que se convierten en viejos sólo por el hecho de tener nietos, en cambio, otras sienten un renacer interior, una fuerza que los empuja a vivir cosas nuevas ante la presencia de un nieto, recuperando la ilusión, la energía y las ganas de aprender y enseñar al recién llegado.

Aceptando el rol de “abuelo”                                                                                   

    Es posible que algunos abuelos se sientan confundidos o quizá no están preparados para jugar este nuevo rol. Convertirse en abuelo significa adquirir un papel social diferente, pero es preciso que se reconozca este nuevo papel y ser conscientes que en ello interviene:

     1. La forma de interiorizar y aceptar el nuevo papel en la familia.

     2. La manera de resolver el conflicto interno entre el deseo y el temor por tener nietos. El deseo de ser abuelo está relacionado con la oportunidad de disfrutar con los hijos de los hijos, recordando, pero no imitando, la propia maternidad o paternidad y sin la responsabilidad directa de los padres.

     3. El estado de salud, la capacidad motriz, la agudeza visual y auditiva ya no es la misma.

     4. Se dice que se envejece como se ha vivido. El modo de ser del abuelo dependerá de cómo haya vivido su niñez, cómo fue hijo y nieto. Se recuerda la relación con los propios abuelos, y se imita o se mejora.

     5. También influye cómo se ha vivido la edad adulta y cómo es, y como fue, padre o madre.

    6. Hasta hace poco convertirse en abuelo marcaba el ingreso a la tercera edad. Actualmente, no equivale a ser viejo. Hay abuelos que están viviendo en plenitud laboral, social o familiar, y tener nietos no los ha convertido en “viejos”.

     7. Es importante que se acepte el paso del tiempo, es decir, el nacimiento de un nieto significa que el tiempo está transcurriendo, y es importante que lo acepten los adultos mayores y se adapten a esta etapa de la vida, lo cual implica un duelo, pues significa pérdida de la juventud, de actividades, incluso de los hijos, por lo tanto, si la persona adulta no logra integrarse a su nuevo rol, tratará de seguir haciendo  lo que hacía antes, hace 20 o 30 años.

La importancia de este rol                                                                                       

 Ser abuelo es una oportunidad única para muchas vivencias. Se pueden aprender nuevas formas de convivir entre las tres generaciones que han surgido dentro de la propia familia para aprovechar la ocasión de estar en contacto con otras formas de vivir, otros conocimientos, otros puntos de vista. Por eso es importante organizar reuniones familiares para estar juntos y disfrutar. Es el mejor escenario para convivir en familia y el abuelo pueda sentirse protagonista.                                                       

 Asimismo, los abuelos juegan un papel muy importante dentro de la familia, pues para sus propios hijos significan apoyo y consejos, y es importante para éstos contar con ese apoyo, pero siempre poniendo límites en cuanto a la educación de sus hijos, ya que esto solo le corresponde a ellos, lo que los abuelos deben hacer es dar asistencia a sus nietos o quizá solo aconsejar a sus hijos en algún aspecto en la educación de sus propios hijos, siempre y cuando ellos mismos lo pidan. Por ejemplo, deben respetar lo que los padres decidan respecto de cómo educar a sus hijos, si la mamá acostumbra darle de comer a su hijo a las 6.00 p.m., entonces la abuela cuando tenga al nieto debe darle de comer a las 6:00 p.m.; los abuelos no son los que educan y no deben cambiar hábitos y costumbres.

Los nietos le dan un nuevo significado a la vida de los abuelos, a la etapa que están atravesando, es decir, a la vejez, por esta razón, es importante que los padres fomenten la relación entre abuelos y nietos, pues existen investigaciones que señalan que cuando los abuelos están presentes desde el momento del nacimiento de sus nietos, se fortalecen los vínculos afectivos, a diferencia de cuando los ven poco o los conocen después de unos meses o años, pues el bebé lo ve como un extraño no como familiar.

 Predicar con el ejemplo                                                                                                                                 

   El vínculo entre abuelos y nietos depende de cómo el abuelo viva su vejez, pues será la manera en la que su nieto asimile y aprenda este proceso propio y natural de esta etapa. Si el abuelo o la abuela temen envejecer y todo el tiempo tratan de mantenerse jóvenes, transmitirán este miedo al pequeño, y cuando llegue a esta etapa de la vida lo más probable es que manifieste la misma conducta que haya aprendido de sus abuelos, pues recordemos que los niños aprenden a través del ejemplo. Por medio de su propia familia, aprenden cómo relacionarse en su medio social.

 ¿Cómo lograr el vínculo familiar con el abuelo?                                                      

  Al favorecer su independencia. Los abuelos quieren tener tiempo para sus cosas, por inútiles que puedan parecer al resto de la familia, también necesitan su espacio. Si están a gusto en su casa no hay por qué forzarles a trasladarse a otra. Una cosa es invitar con insistencia y cariño, otra muy distinta imponer el criterio de los hijos.                                                                                            

  Para ellos es una nueva oportunidad de hacer con los nietos lo que no hicieron con los hijos de manera razonable y ocasional. Es bueno hacerse de la vista gorda cuando “malcrían” a los nietos concediéndoles algún capricho.                                                                                                                  

  Los nuevos padres deben ser agradecidos con ellos y enseñar a los nietos a que lo sean.                

  Debieran escucharlos y respetar su manera de pensar aunque no coincidan con el de la generación más joven de la familia. No es cierto que “cualquier tiempo pasado fue mejor”, ni tampoco que todo lo actual es extraordinario o infalible.

Algunos conceptos que se deben entender:                                               

        1. Los padres deben enseñar a sus hijos sobre el respeto que se les debe tener a las personas mayores, incluyendo a sus abuelos.

     2. El abuelo puede jugar un papel muy importante dentro de la familia, ellos pueden dar a sus nietos seguridad afectiva, tranquilidad y estabilidad.

     3. Cada miembro de la familia juega un rol y todos deben estar integrados en una dinámica. El adulto mayor debe asumir que solo es el abuelo, los padres asumir su paternidad y son quienes educan y establecen límites y reglas.

Actitudes positivas de los abuelos

    1. Ser independientes mientras se pueda. Al margen de su edad, los abuelos tienen derecho y necesidad de disfrutar de su propio espacio vital.

     2. Respetar las pautas educativas que sus hijos proponen a los nietos, aunque no se esté totalmente de acuerdo con ellas.

     3. Muy importante: no desautorizar a los padres delante de los nietos, aunque en privado puedan expresar sus discrepancias. Las opiniones de los abuelos son una referencia para los padres.

     4. Ser abuelo es la oportunidad para establecer con los nietos una relación privilegiada, la ocasión para vivir lúdicamente con ellos, gratificándolos, pero sin excederse, Se deben poner límites para que los nietos no se conviertan en pequeños tiranos.

    5. Aprovechar para transmitir vivencias y recuerdos. Las personas mayores tienen como patrimonio el pasado y “las historias del abuelo” aunque se repitan una y otra vez son el recuerdo que quedará impregnado en las mentes de los nietos. Quedará el cariño y la nostalgia con que se transmitieron con tales historias.

     6. Los abuelos pueden completar la educación de los padres, pero nunca suplirla.

Consecuencias de la falta de una buena actitud

Lo positivo, es que los abuelos acepten su rol de abuelos y que sus hijos ya son padres y no son más sus niños a los que hay que imponer y lo negativo es cuando los abuelos intentan ser controladores e imponer sus ideas y no hacer caso a las ideas de sus hijos para con sus hijos. Él o la abuela no debieran aferrarse al pasado ni tener nostalgia de lo que no hicieron: “¿Qué hice con mi vida?, ¡no eduque bien a mis hijos!, etc. Por el contrario los abuelos deben saber que pueden proveer de amor incondicional a los nietos, y que eso los ayudará  a desarrollar una mejor salud emocional. Diversos estudios demuestran que en los niños tiene un impacto positivo interactuar con sus abuelos. El tiempo de los nietos compartido con sus abuelos es tiempo de oro y para ambos estas relaciones les genera salud emocional y bienestar físico.

A TOMAR EN CUENTA:

Los contenidos de este tema médico sólo tienen carácter de información general. Esta información no debe ser utilizada con fines diagnósticos o de tratamiento. Sólo el profesional de la salud con licencia está facultado para tomar las decisiones adecuadas tras la evaluación de cada caso en concreto.

Autora: Psic. Alejandra Rivas   

Coordinador de la página: Dr. Salvador Alvarado Gonzàlez

DATOS DE AUTOR: * Psicoanalista de la Sociedad Psicoanalítica de México (SPM).