Hay que ponerle un freno a las muertes por siniestros viales
En Argentina seguimos manteniendo un elevado número de fallecidos en hechos de tránsito
* Por Fernando Ulloa, Responsable de Conducta Vial (www.conductavial.com).
Como todos los años el 10 de junio último se conmemoró el Día Nacional de la Seguridad Vial y desde distintos ámbitos y entidades relacionados a la problemática vial se realizaron jornadas conmemorativas a través de las cuales se busca que el principio de precaución, el cuidado del otro y la convivencia en el tránsito estén siempre presentes en nuestro transitar. Desde la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) se llevó a cabo la campaña “Todos somos el otro”. Desde la misma y desde muchas otras jornadas llevadas a cabo por distintas Organizaciones, por Asociaciones de Familiares de Víctimas Viales, etc., se invitó a reflexionar y concientizar sobre el respeto a las normas de tránsito y a la necesidad de que haya un compromiso colectivo con la vida por parte de todas y de todos. Ese día y siempre debemos recordar que como peatones y conductores compartimos un espacio común, donde no sólo transitamos, sino también convivimos con otras personas. Cruzar la calle, conducir un auto, una moto o una bicicleta son, en apariencia, acciones simples, que mal realizadas pueden ser la causa de un siniestro vial, provocando lesiones graves y hasta pérdidas humanas. Por ello, todos debemos cumplir la ley para cuidarnos, pero también para cuidar al otro. Se trata de lograr un cambio cultural que transforme conductas imprudentes en responsables a la hora de circular. En definitiva, ponerle un freno a las muertes por siniestros viales.
Pero una cosa es el deseo y otra es la realidad y esta última nos muestra que se observa un relativo esfuerzo por parte del Estado y de los organismos encargados por intentar encarrilar este grave flagelo pero el problema es muy serio e importante, el trabajo realizado no alcanza y los resultados no llegan. Es mucho lo que hay que trabajar, hacer y modificar para intentar lograr disminuir los siniestros viales que tantas muertes y daños físicos, psicológicos y materiales provoca entre las personas en nuestro país y en el mundo.
Según la ONG Luchemos por la Vida en los primeros cuatro años del Decenio de Acción para la Seguridad Vial fijado por la ONU (Organización de Naciones Unidas) no se ha logrado disminuir los muertos en el tránsito ni siquiera un 1%. Según la ONG pese a que las Naciones Unidas, declararon los años 2011-2020 como el “Decenio de Acción para la Seguridad Vial” y los países integrantes se comprometieron a concretar acciones que conduzcan a disminuir los muertos en el tránsito un 50%, todavía, en Argentina, no se aprecian avances sustentables que acarreen una disminución significativa del número de muertos y heridos. A modo de ejemplo en Suecia, entre 1990 y 2012, el % de disminución de muertos en tránsito fue del 63 % pasando de 772 a 285 las personas fallecidas; en Holanda el % de disminución fue del 59 %, en USA del 25 %, en España del 79 %. En Argentina el porcentaje de disminución de fallecidos en siniestros viales fue del 0 %. En 1990 fallecían en nuestro país unas 7.075 personas y en el 2012 fueron 7.485.
En Argentina, donde seguimos manteniendo un elevado número de muertos en hechos de tránsito, tenemos, entre otros, graves problemas con los motociclistas. Pese a que es obligatorio el uso del casco los conductores en muchas ciudades hacen caso omiso a dicha normativa y circulan sin dicho elemento de seguridad colocado en la cabeza, multiplicando el riesgo y la posibilidad de lesiones leves, graves y/o muerte. Tenemos problemas también con el uso de celulares por parte de conductores mientras van conduciendo sus vehículos o por parte de los peatones mientras van caminando por la vía pública, o de los ciclistas mientras van circulando en sus bicicletas. Hablando de ciclistas seguramente podremos ver a algunos con las elementales normas de seguridad, como ser el uso del casco, solo en la Capital Federal. En el resto del país su uso es nulo.
Otro falta grave que realizan los conductores en nuestro país es, en las rutas, es no respetar la distancia de seguimiento entre un vehículo y otro. Se trata de algo que se cumple poco y es difícil de controlar. Un reciente relevamiento del CESVI, el Centro de Experimentación y Seguridad Vial de Argentina, sobre este tema, determinó que el 80% de los conductores no mantiene la distancia de seguimiento, es decir no se respeta el espacio necesario para garantizar una frenada segura generando un grave problema dado que es una de las causales más altas de siniestros por alcance. La ley dice que la distancia entre vehículos debe ser de 2 segundos, las entidades de seguridad vial proponen que sea de 5 segundos, sin embargo el promedio general de distancia entre autos durante el relevamiento fue de 1,41 segundos. Esto demuestra que es una práctica casi desconocida para el común denominador de los conductores, incluidos vehículos particulares de menor porte así como camionetas y camiones.
Podríamos enumerar muchísimas otras acciones que atentan contra la seguridad vial que son desconocidas por la mayoría de los conductores de vehículos en nuestro país. O si las conocen no las respetan.
Es por eso que queda más que claro que más allá de estas valorables campañas para afrontar el flagelo de las muertes en siniestros viales es necesario intensificar las campañas de seguridad vial, con jornadas educativas en los distintos establecimientos escolares de todos los niveles. Asimismo se debe tomar conocimientos de la importancia de realizar controles vehiculares, a ciclomotores, motocicletas y cuatriciclos, supervisar la presencia y utilización de los elementos de seguridad y documentación, efectuar test de alcoholemia los fines de semana, controlar los cruces en semáforos y adelantamiento indebido, exceso de cargas, transporte de pasajeros de corta, media y larga distancia, entre otras medidas.